29 de septiembre de 2007

.romA

No seré tu cesar ni tu gladiador.
No crucificare a tu Mesías ni lo ignorare.
No visitare tu coliseo ni lo derrumbare.
Ya no esta en mis planes, visitar romA de tu mano.

12 de septiembre de 2007

SALTO CUÁNTICO

A medida que el ritmo de la vida a pasa a través mío
Acompañado por un tambor,
Incorporo el ritmo de la evolución....
Cada célula se renueva y se agiganta con el impacto sonoro
Ya mi sangre es cada vez mas poderoso caudal
Y se transforma en océano de sabiduría.
Llego a la quietud en la aceleración de mi danza de vida,
Me vuelvo ágil y observadora de mis verdades mas puras.
La vida se transforma en una ceremonia
Mi centro es el centro que me equilibra
Respiro para sumergirme en otros aires,
Para crear un cielo en mi pecho
Y al desinflarme, morirme abrazando la tierra
Es necesario para mi terminar esta danza en otro lado
Acrecentar el movimiento que derrumba viejas estructuras
Desafiar a la mente con la satisfacción y la certeza mutante.
Nada mejor que reírse en el llanto,
O gritar en silencio.
Quemarse en el agua,
O caminar por el viento...
Nada mas completo que las dos partes
En uno mismo.

¿Cuántas palabras para pulir conceptos y llegar a verdades más claras?


¿Cuántos tachones hasta lograr el claroscuro perfecto y armónico en una hoja?


¿Cuánto kilómetros de letras para llegar a querer lo que se escribe???’’’’’

11 de septiembre de 2007

Mascota (titulo experimental)

Al principio fue un poco raro para la gente del lugar acostumbrarse a ver su imagen rondando por las veredas. La tía se enoja cuando le digo que él es mi mascota, que no bromee con algo así, y cuando son las seis y media en el invierno nos prohíbe salir. Con Lucía nos escapamos por la ventana de atrás y jugamos con él, corriendo, saltando, riendo y tocando su pelo blanco que tanto le gusta, hasta que se hacen las ocho, momento en que la tía deja de ver su programa con volumen alto, entonces nos metemos despacio sin hacer ruido alguno y ella nos hace café con leche y nos cuenta historias de gente bonita que siempre se termina casando.
Pero esa tardecita no dieron su programa, y al no vernos en la cocina salió a la vereda enojada a buscarnos, nunca pensamos que reaccionaría así al verla… y aunque pensábamos que era nuestra mascota no podíamos controlar sus acciones.
Ahora a las tardes no son de corridas, saltos, risas, ni pelo blanco, y a las ocho hay café con leche y nos faltan los principios de las historias de gente bonita que termina casándose.
***

8 de septiembre de 2007

El séquito y los arlequines.

I. habladurías del séquito.
Incompresible es el bardo, de aquel lúgubre seguidor.
Anchas las banderas que cargan a sus pies.
Jinetes que repiten en vano, ordenes sin piel.

_¡Déjanos en paz!, ¡Déjanos en paz! Gritan arlequines.

Y el sequito tapa su oídos afirmando que es deber.
Continúa su camino siguiendo a aquel corcel.

_¡oh!, pobres las entrañas. ¡oh!, pobres arlequines!, que no encuentran el saber.

El sequito se lamenta con vehemencia en la voz. Burlándose de seres,
que no entienden su pesar, mientras ellos solo observan su pasar.

II. sensaciones de arlequines.
Comprendiendo burlas pero no misiones, continúan todos de pie,
Los arlequines no sospechan de las trampas de este rey.
Su razón aun mas simple que la de seguir a aquel corcel…
su pasión esta colmada al verte sonreír.

Los pasos más tranquilos y mas limpias las visiones,
que la vida del sucio seguidor….

_¡la pena no vale lamentarse! ¡déjanos en paz!…

Gritan arlequines alejándose del perseguido jinete…
Le gritan ellos a aquel que su misión ha de imponer.

_¡maldito seas, inútil séquito!…
¡tu vida no depende, ni siquiera, a los ojos del corcel!

Arlequines que se unen denigrando el saber,
preferible que solo el sequito lo posea
y así tranquilo podrá arder.

Tan Ícaro.

Contemplo rayos de tu iris.
En mis ojos…
Cuan puñal. Hiere.
Cera derretida toca mi cuerpo.
En mis hombros…
Cuan leño ardiente. Quema.

Más aun así no detengo mi vuelo.
No soy parte de mito alguno.

Esplendor en la esclerótica de tu espacio.
Anhelada oscuridad de tu mancha solar…
Y al fin…
En el centro…
el brillo de tu pupila.